Anya Culling: «Correr me da tranquilidad y confianza»
En cuatro años, la inglesa Anya Culling pasó de ser una runner entusiasta a integrar la lista de atletas de elite en la Maratón de Londres y terminar en el top 20 de la clasificación femenina.
Oriunda de Norfolk, Culling comenzó a correr para priorizar «el bienestar emocional» y encontró en el running un lugar para disfrutar el lado social del deporte.
Con 2 horas y 44 minutos, finalizó en el puesto 16. Más allá de que no fue su mejor marca (cuenta con 2 horas y 36 minutos), la felicidad por ser finisher y rodearse de las mejores atletas es plena.
Los primeros pasos de Anya Culling
Si bien su primer maratón fue en 2019, cuando hizo los 42 kilómetros en 4 horas y 34 minutos. Venía de superar una intervención quirúrgica en la que le extirparon un tumor benigno y se debió someter a radioterapia para tratar una tiroides hiperactiva.
«Simplemente perdí gran parte de mi confianza», relata recordando su estado emocional en aquellos tiempos. De hecho, por los medicamentos, Anya aumentó de peso, aunque encontró dentro del running una forma de sentirse mejor».
«Correr era una manera de estar saludable y encontrar esa confianza nuevamente. Nunca he sido una persona más segura de mí misma y no es realmente por los resultados sino por cómo me ha hecho sentir», sostuvo.
Resultados de la maratón de Londres AQUÍ
De runner amateur a atleta de elite
Si bien siempre hizo deporte, nunca fue «de las que ganaban». A pesar de ello, corría con frecuencia, pero fue recién en pandemia que empezó a darle mayor prioridad al running.
«No fue hasta el encierro que me di cuenta de la tranquilidad de correr y de su simplicidad. Eso realmente me ayudó a superar el encierro y fue cuando realmente comencé a disfrutarlo. Naturalmente, progresé en mi entrenamiento a medida que continuaba», relata la atleta inglesa.
A la hora de hablar sobre el estar dentro del pelotón de atletas de punta, Anya se sincera: «Nunca pensé que sería capaz de hacer esto; nunca estuvo en mi mente. Los tiempos y las marcas personales siempre fueron secundarios».
“No sé si no me habría enamorado del running si hubiera competido desde que era una niña. Llegar a este mundo un poco mayor me ha ayudado a darme cuenta de que no hay prisa. Tengo años y años para llegar al máximo nivel y la única manera de lograrlo es si sigo disfrutándolo. De lo contrario, no tiene sentido”, replica a los 24 años.
Razones para correr
Fue en 2019 que corrió su primer maratón, y a la hora de hablar de los motivos que la llevaron a hacerlo, recuerda: «No fue hasta que aprendí a apreciar la tranquilidad y la simplicidad del deporte que realmente me contagió. Tengo un cerebro bastante ocupado y correr lo silenció».
«Aprendí que correr no siempre tiene que ser difícil y que en el entrenamiento hay lugar tanto para carreras fáciles como para carreras difíciles. Para mí, se trata de no pensar, perderme y aquietar mis pensamientos», remarca.
Finalmente, Anya concluyó con un mensaje para aquellos que aún no comenzaron a correr: «A menudo me preguntan ´por qué corro´. Creo que todo se reduce a mi búsqueda de la valentía. En la vida tienes que superar muchos obstáculos; estoy en una batalla constante con mi cerebro diciéndome que no puedo hacer cosas. Correr me ha enseñado a encontrar mi fuerza interior y demuestra que soy más capaz de lo que jamás pensé. Entonces, ¿por qué debería limitarme en la vida cotidiana? Estoy viviendo un sueño por el que trabajé duro. Ya no tengo miedo de lo que piensen los demás. Mi mayor esperanza es que alguien me mire y piense: Si ella puede hacerlo, ¿por qué yo no?».