Con casi 90 años no para de correr
El correr no tiene barreras y el mejor ejemplo se ve en Ian Barnes, que cumplirá 90 años en diciembre, y posee tres récords británicos en carreras en la categoría de mayores de 85 años.
Cuando tenía 21 años, Ian Barnes compartió el asombro mundial cuando el legendario atleta británico Roger Bannister rompió el récord de cuatro minutos por milla (1,06 kilómetros) en 1954.
«Supongo que es mi héroe», confiesa Barnes a Business Insider.
El logro de Bannister lo inspiró para empezar a correr de manera competitiva, un deporte en el que todavía se destaca a los 89 años.
El abogado ya jubilado posee tres récords británicos en la categoría de mayores de 85 años: una milla (8:10.40), 1.500 metros (7:38.41) y 3.000 metros (16:34.42).
Correr a los (casi) 90 años
Dado que los récords se establecen en grupos de edad de cinco años, planea lograr más después de cumplir 90 años en diciembre.
«Hoy en día, compito contra el reloj», cuenta Barnes, señalando que pocas personas de su edad corren a un nivel similar.
Dijo que los organizadores de la carrera usan frecuentemente ordenadores de porcentaje de tiempo para «clasificar por edad» su desempeño. Las estadísticas muestran que regularmente supera a atletas que tienen menos de la mitad de su edad.
Un software de ajuste de edad mostró recientemente que estaba entre los 10 corredores más rápidos en una carrera de 500 participantes a pesar de ser con diferencia el competidor de mayor edad. «A mi edad, no se puede esperar ganar carreras, así que el objetivo es batir récords», añade.
El apoyo de su esposa
Su casa en el noreste de Inglaterra está repleta de medallas y diplomas. Muchos están guardados en cajas en el ático después de que su esposa, Margaret, de 89 años, se cansara del desorden.
«Ella me ha apoyado mucho a lo largo de los años», narra Barnes. «Pasó mucho tiempo parada en los campos esperando a que yo pasara corriendo». El abuelo de dos nietos con un «don» para correr en la escuela primaria, se adentró seriamente en el deporte después de terminar su servicio nacional en el ejército británico.
Estuvo destinado en Londres, donde se sentó en las gradas para contemplar a Bannister y a sus rivales competir en la pista. «Fue un momento emocionante porque se estaba haciendo historia».
La experiencia lo animó a unirse a clubes de corredores locales. Entrenaba después del trabajo y corría carreras de larga distancia los fines de semana.
«Tuve algún éxito, pero sabía que solo podía alcanzar cierto nivel», reconoce, señalando que su trabajo y el cuidado de una familia ocupaban la mayor parte de su tiempo.
Luego, en la mediana edad, comenzó a competir en categorías de veteranos, también conocidas como Masters, y ganó una serie de títulos en Reino Unido y Europa.
Pero su mayor logro, afirma, llegó en 2020, cuando rompió el récord británico de más de 85 años al correr más de un kilómetro y medio en ocho minutos y 10 segundos. Al año siguiente, obtuvo los récords de 1.500 metros y 3.000 metros para su grupo de edad.
«Ha sido muy gratificante», reconoce Barnes, que se retiró de la abogacía a los 76 años. «Es una buena manera de poner punto final a la carrera».
Pero el octogenario no tiene intención de dejarlo del todo. Su objetivo es convertirse en la persona mayor de 90 años más rápida de Gran Bretaña. «Todo tiene que estar certificado y ser oficial, pero vale la pena el papeleo».