¿Por qué el GPS del reloj da más metros en una carrera?
A la hora de hablar de maratón, se sabe que la distancia oficial de la prueba es de 42.195 metros, pero prácticamente nunca el GPS de los relojes deportivos mide eso, sino un número mayor.
Es cierto que en las carreras de 5, 10 o media maratones también ocurre esta situación, pero las diferencias entre la distancia reglamentaria y el resultado del GPS es menor, pero ¿por qué sucede esto?
Ya sabemos que lo primero que se escuchará es «el circuito estaba mal medido», pero no es la respuesta cierta. En concreto, hay diferentes respuestas, que van desde la conexión del reloj con el satélite hasta la medición de cada aparato respecto a la ruta de carrera.
La conexión satelital
A la hora de activar el GPS para que tome la señal y se conecte al satélite, esto puede tardar -en ocasiones- algunos minutos- lo que puede llevar a que el comienzo de la carrera haga que el reloj mida la distancia recorrida con una versión automática y no tan precisa.
Asimismo, también puede darse que durante el recorrido se pierda la señal, lo que haga menos precisa la medición, y a mayor distancia de la carrera (tomando en comparación un 42k con un 10k), la diferencia será obviamente mayor.
Tampoco hay que dejar de considerar la calidad de precisión de los equipos, como el lugar donde se desarrolla el evento, teniendo en cuenta que en sitios céntricos la señal será obviamente mejor.
Correr tangencialmente, el desafío
A la hora de pensar en cómo correr una carrera, lo ideal es hacerlo de manera tangencial. ¿Cómo es eso? En geometría, una tangente es una línea recta que toca un punto en una curva o un círculo, pero no lo cruza.
O sea, sería correr la prueba de manera más recta y pasando por los interiores de las curvas, evitando hacer metros de más y hacerlo de la manera más recta posible, pero sin cortar camino o hacer trampa.
En mediciones oficiales se debe medir el recorrido más corto posible, respetando estos principios y en las principales maratones del mundo, se suele marcar este camino con una línea azul para tener referencia.
Hay que tener en cuenta que estos parámetros y protocolos son los tomados por la AIMS (Asociación Internacional de Maratones y Carreras de distancia) y la IAAF (Federación Internacional de Atletismo).
Las carreras populares y los puestos de hidratación, una trampa
Teniendo en claro que «correr de manera tangencial» es lo ideal, también hay que tener en cuenta que eso se puede hacer prácticamente sólo sin gente en el recorrido, un hecho risueño si uno participa en una carrera popular.
Por lo tanto, en ciertos tramos se volverá casi imposible correr por donde uno quiere, sino que se tendrá que hacer por donde se pueda para avanzar sin chocarse con otros competidores.
Y al llegar a un puesto de hidratación, la misión no será tarea fácil porque en ocasiones uno va corriendo por el centro y por cada sitio que se desvíe un par de metros a un costado para tomar un vaso de agua, sumará más distancia entre la ida y vuelta.
Además, en las pruebas multitudinarias, será complicado poder seguir una línea recta o pasar por donde uno quiere, a causa de la gran cantidad de corredores, lo que volverá más complicado hacer el camino lineal o más directo.